Este libro se ocupa de la problemática de las educadoras por dos razones fundamentales: en el universo de los profesionales de educación preescolar siguen siendo la abrumadora mayoría; además, en las políticas y prácticas en la formación de personas especializadas para este nivel las cualidades de ellas son relevantes en los símbolos culturales de este campo. Por ello, de investigación tiene como epicentro la formación profesional de las mujeres educadoras. ¿Están formándose intelectual y moralmente las educadoras para promover las buenas prácticas educativas con los alumnos de preescolar?